El arte y la crítica
Cuando un artista crea, no solo lo hace para sí; también lo hace para que alguien logre encontrar una conexión con su mensaje y exista una comunicación mágica y sublime entre ambos. Sin embargo, no todos los espectadores podemos alcanzar a comprender ciertos símbolos si no estamos versados en el arte que observamos. Por tanto, siempre es importante contar con alguien que conozca los símbolos y nos acerque con claridad al mensaje que el artista emite. Eso hace el crítico o crítica; pero no únicamente.
Buscando Salidas de Mercedes Arellano
Cuando un espectador ve una obra, puede opinar si le gusta o no; o si le parece “fea” o “bonita”; lo cual es un buen paso, ya que finalmente hay cierta comunicación. Pero un dictamen con base en el pensamiento crítico, en razonamientos técnicos, en las reglas de las bellas artes, no es una opinión sino, justamente eso, un dictamen objetivo y digno de ser conocido por los demás.
Por tanto, para un artista es importante la crítica, pero también lo es reconocer la labor que los críticos realizan, ya que también se exponen y nos dan una visión más amplia de la realidad de la obra, exposición o evento que tenemos frente a nosotros.
El arte invita, así, no solo a sentir, sino a opinar y generar ideas propias; pero el crítico, justifica esas ideas y nos explica el por qué una obra tiene ciertas cualidades o defectos; o nos abre los ojos sobre qué es lo más importante de la obra que vemos y, así, poder lograr una conexión más cercana con el mensaje del artista.
Ahora bien, puedes estar de acuerdo o no con el crítico, quien puede alabar o destrozar una obra y, con todo y ello, tu sientas lo opuesto. Perfecto. De ahí la grandeza del arte. Independientemente de los que otros digan, tú eres el mayor juez sobre lo que te gusta o no y ese, también, es tu derecho.
